26 de febrero de 2014

Rafael Solano: Música popular con traje de gala.

El maestro Rafael Solano estuvo el lunes 24 de febrero en el programa "Esta noche Mariasela", recibiendo un merecido homenaje a su grandiosa trayectoria musical. Estuvieron presentes los cantantes: Niní Cáffaro, Luchy Vicioso y "El Magistrado" Fernando Casado, tres de los frutos que sembró el maestro Solano en los años sesenta cuando producía y conducía el espacio televisivo "La Hora del Moro", que se transmitía por Rahintel, canal 7, en Santo Domingo. Me extrañó mucho no ver al también cantante Vinicio Franco, quien permaneció junto a la orquesta de Solano por muchísimos años. La mayoría de nosotros, que no recordamos o no estuvimos en los tiempos en que Cáffaro, Casado y Vicioso formaron parte del elenco del programa de Solano, sí recordamos a Vinicio Franco cantando merengue del bueno en el programa "Solano en Domingo", cuyo nombre tampoco se mencionó.

Solano en Domingo también tuvo su época de prestigio en la televisión dominicana, era un espacio de mucho garbo y clase, culto… fino. Así ha sido la permanencia de Rafael Solano en la historia de la cultura musical de nuestra nación. Llegó a Santo Domingo en el año 1950, proveniente de su natal Puerto Plata, e inmediatamente pasó a formar parte de "La Voz Dominicana", televisora que ostentaba la presencia de los mejores artistas dominicanos de la época y que contaba con varios profesores de arte de fama mundial traídos desde Europa y otros lugares, bajo la supervisión y dirección de Petán Trujillo. Se le preguntó a Solano cómo fue que él no llegó a escribir una canción para "El Jefe", como llamaban a Rafael Leonidas Trujillo, en aquellos años, y el maestro contestó que "fue un golpe de suerte que no lo hiciera". Añadió que recibió la noticia de que en una reunión de Trujillo con su séquito gubernamental salió a relucir que Solano nunca había escrito un tema para Trujillo. Al enterarse de los rumores, el maestro Solano intentó escribir la canción para evitar caer en desgracia con el régimen trujillista. No logró obtener inspiración, pues eran tantos los temas sobre Trujillo que él no encontraba nada nuevo que decir sobre el Jefe.

A finales de los cincuenta marchó al extranjero, a Nueva York, donde siguió perfeccionando su conocimiento musical.

Ya a la edad de nueve años Rafael Solano tocaba el violín. Cuando se le preguntó el porqué se dedicó a la música popular si su meta era la música clásica, el maestro respondió que: "Hoy en día todavía es imposible vivir de la música clásica en nuestro país". Es duro tener que aceptarlo, pero es así. Solano dijo que sabía como había dejado a su madre en Puerto Plata y tuvo que dedicarse a cultivar el ámbito popular para hallar su sustento y el de su madre. Puso como ejemplo que un concertista de piano tarda alrededor de un año ensayando y preparando un concierto y luego hace una presentación en el Teatro Nacional, o quizás dos, y eso es todo. Expresó que es algo diferente en Europa donde los pianistas de concierto se presentan oy en Marsella, mañana en París, y pueden dedicar todo un año a presentaciones fruto del año que duraron ensayando.

Cantantes como Fernandito Villalona, Adalgisa Pantaleón, y muchos otros, salieron de aquellos famosos festivales de la voz que el maestro Solano organizó en los años setenta. El legado de Solano a nuestra cultura es incalculable, incluso él mismo no podría saber cuántas vidas ha influenciado con su carácter y dedicación. Su hija, la comunicadora Patricia Solano, dijo que su padre nunca les habló ni a ella ni a sus demás hermanas en un tono fuerte, por el contrario, siempre les habló con mucho amor y ternura. De esa manera se ha ganado el respeto y admiración de todos sus familiares, amigos y personas que han trabajado con él.

Lo mejor de todo es que el maestro Rafael Solano se mantiene fuerte y sano a pesar de los años transcurridos, que son muchos, dedicados a la música. Dijo sentirse saludable y que cuando va a cualquier médico a consultarse por asuntos de rutina, siempre lo reciben cantándole su canción "Dominicanita". Y es que esa y muchas otras canciones de Solano forman parte fundamental de nuestra historia musical. Aunque todo el mundo sabe que su canción más emblemática lo es "Por amor", que ha sido grabada en diversos idiomas por varios cantantes de distintas épocas y culturas.

El Señor continúe bendiciendo los pasos del maestro Rafael Solano y nos permita seguir disfrutando por mucho tiempo más de su talento, sus composiciones y la magia musical que brota de su piano a través de sus manos.

25 de febrero de 2014

Matías Ramón Mella. Poema en su honor.

 

Uno de los tres padres de la patria Dominicana. Fue un estratega militar que luchó en la guerra independentista para expulsar a los haitianos de nuestro territorio y luego luchó en la guerra de Restauración en contra de Pedro Santana y el ejército español del bando de los anexionistas. Fue el ideólogo de la guerra de guerrillas que usó el ejército dominicano para derrotar al bando que propugnaba la anexión.

Escribí este poema en su honor como una muestra de agradecimiento a su memoria por haber dado toda su vida a la causa de nuestra patria. Hoy, 25 de febrero, día de su natalicio. ¡Qué viva Matías Ramón Mella! ¡Qué viva la República Dominicana!   



Cuando pienso en Mella.

Cuando pienso en Mella, quiero verme en él.

Anhelo tener siempre su valentía, su amor por nuestra patria y su lealtad.

Cuando pienso en Mella, imagino aquel muchacho, miembro de los trinitarios, que arriesgó todo en su vida para darnos libertad.

Y no quiero recordarlo los 25 de febrero. Como hermano, como amigo, lo recuerdo el año entero.

Porque un día no me basta para sentirme orgulloso de haber nacido en la misma ciudad que lo vio nacer.

Porque un día es poca cosa para tantos ideales que aprendimos de él.

Pienso en Mella el año entero, pienso en Mella en todos lados; En el parque, en la piscina, en mi casa, en el mercado.

Pienso en Mella y me estremece sentirme dominicano.

¡Patria hermosa!, ¡Patria amada! ¡Cuántos héroes has parido!

Es Matías Ramón Mella uno de tus preferidos.

No fue sólo aquel trabuco disparado por sus manos,

Es su valor, es su hombría, por lo que lo recordamos.

Que como tú, Ramón Mella, sean nuestros militares.

Que políticos y gobernantes defiendan tus ideales.

¡Amor para nuestra patria! ¡Amor para nuestra gente!

La libertad que tenemos, dominicanos, hermanos, tenemos que mantener.

Cuando pensemos en Mella... ¡queramos ser como él!

21 de febrero de 2014

Xiomara Fortuna: Auténtica, profunda... Inmensa.

Escucharla hablar acerca de los primeros años de su vida en su natal Montecristi hace que uno vea en ella el cristalino espejo de la inocencia que se ha quedado plasmado en todo lo que ella representa para la cultura y tradición del pueblo dominicano. Su nombre: Xiomara Fortuna. Su principal grandeza es la humildad. El sonido de su voz y sus palabras producen un instantáneo placer que hace que uno quiera escuchar un poco más. En la entrevista que esta tremenda cantante ofreció al programa “Sigue la Noche”, con Pamela Sued de anfitriona, conocí algunos pequeños detalles de su vida que hoy deseo compartir con ustedes. Xiomara fue una niña algo distraída, a quien le gustaba estar sola, meditando sobre la naturaleza y aún cuando pertenecía a grupos culturales en su provincia, siempre se mantenía en su propio mundo de ensueños. Su primera oportunidad de viajar al extranjero le llegó siendo una adolescente, se encontraba haciendo los preparativos que usualmente hacen los jóvenes del interior cuando han planeado venir a estudiar a la capital. Había calculado que estar lista le tomaría casi dos años: comprando la maleta, ir guardando la ropa adecuada, haciendo ahorros, entre otros asuntos de esa índole. Fue entonces seleccionada entre varios jóvenes de todo el Cibao, para viajar a Cuba a representar su región en 1978. Al llegar a Santo Domingo le fue informado que el viaje se había cancelado pero que en los próximos días saldría una comitiva dominicana para un festival cultural en Jamaica, preguntándosele si ella querría participar del mismo. Sin ofrecer una respuesta se quedó pensándolo mientras los organizadores preparaban sus documentos de viaje. Fue así como salió por vez primera de nuestro país, llevando en su repertorio varios poemas musicalizados del poeta dominicano Pedro Mir. Quedó impresionada del viaje, en el cual abordó todos los medios de transporte que hasta entonces no había conocido: un tren, un trasatlántico, etc. Cuando regresó a Montecristi pasó años narrando toda la experiencia vivida en aquel viaje. Todavía hoy se escucha la emoción en su voz al narrarlo de nuevo. Su primera presentación en el Teatro Nacional fue junto a los artistas de mayor renombre en esa época: Sonia Silvestre, Niní Cáffaro, el maestro Rafael Solano… Tantas celebridades la pusieron algo nerviosa. El público la aceptó con mucho entusiasmo y muchos la comparaban con Rhina Ramírez, lo cual le ayudó a calar más rápidamente entre los amantes de la música. Xiomara es una mujer muy creyente, a quien le interesa todo lo relacionado con el origen y trayectoria de la humanidad, así como los temas de extraterrestres y asuntos esotéricos. Se sorprende a sí misma meditando y contando cosas, le gusta contar cualquier tipo de cosas. Rayas, bolitas… es como si quisiera organizar todo en el universo. Dice que a menudo se desvela viendo documentales en televisión, pues le fascinan esos temas de investigación concernientes al existencialismo, la antropología y diversas ramas del saber científico. Según ella, los mejores programas de ese tipo, como los que pasan en Discovery channel, son transmitido a altas horas de la noche, y ella es muy seguidora de ellos. Cuestionada sobre su parecer acerca de los exponentes de la llamada música urbana, ella dijo que en realidad no tiene mucho tiempo para andar escuchando mucho esas cosas, que ha visto a Melimel en televisión y piensa que ella al menos tiene contenido en sus canciones, que lo malo de ese tipo de género no es la música sino el contenido de sus letras. Xiomara Fortuna… inmensa. Como solo ella puede serlo. Su especialidad en la música de origen africano, y principalmente la música afroantillana, le ha permitido conocer diversos escenarios del mundo. Es una artista completa, de mucha preparación y apasionada con su trabajo. Verdaderamente merece todo el cariño y respeto que le profesa su tierra, el pueblo dominicano. El Señor la proteja siempre y nos permita tener tan buen ejemplo entre nuestra gente por mucho tiempo. Me siento orgulloso y agradecido de la vida por tener entre mis compatriotas a una mujer, tan mujer, de la talla artística y humana de Xiomara Fortuna. Escucha a Xiomara cantando: Llega Mandela.

18 de febrero de 2014

La vida: Parábola del edificio.


La vida es como un edificio de apartamentos cuyo dueño es japonés, no habla español pero entiende un poco el inglés, lo suficiente para comunicarse con sus empleados y orientarles acerca de lo que debe hacerse; En ese edificio vive un inquilino, latinoamericano, que no sabe nadita de inglés, olvídate del idioma japonés porque a él no le interesa siquiera pensar en aprenderlo; entonces existe el superintendente, administrador del edificio del japonés, el hombre es bilingüe y por eso domina bien el español y el inglés. Tiene que supervisarlo todo en el edificio: cambio de tuberías de drenaje, arreglar el ascensor, cobrar las rentas atrasadas, etc, etc. El inquilino latinoamericano casi nunca se interesa por las cosas que le interesan al japonés, a menos que sea organizado y responsable, lo que sí le interesan son sus propias cosas: que el edificio esté limpio todo el tiempo, que la calefacción funcione bien, principalmente las noches de mucho frío, que le reparen las imperfecciones y averías dentro del apartamento que tiene alquilado, etc.

El japonés en cambio hubiera querido no interesarse por las cosas que le gustan a su inquilino, pero está constreñido a hacerlo, porque le afecta que se emborrache y suba el volumen de la música y por ende moleste a otros inquilinos que le darán quejas; también le afecta que no le paguen la renta a tiempo o que desparrame basura en los entornos del edificio porque tendrá que invertir demasiado en limpieza, so pena de ser multado, etc, etc.

El súper, por otro lado, tiene que interesarse por los asuntos de los dos, del japonés y del inquilino latinoamericano. Tiene que explicarle al latino, en español, que puede y será desalojado si: sigue incurriendo en atrasos en el pago, hace ruidos con la música los fines de semana, si se emborracha y comienza a hostigar a la vecina italiana bien bonita que vive frente a su apartamento, etc. Más o menos así es la vida.

El inquilino es el cuerpo físico; el japonés es el cuerpo espiritual; y, el súper es la mente.

Como ves, el japonés tiene todo el poder del mundo, pero un simple inquilino puede aguarle la fiesta a niveles increíbles; el inquilino, si es responsable, puede contribuir a la armonía colectiva, si en cambio es desorganizado e irresponsable, no tomará cuidado en sus acciones pues al final y al cabo: "esa no es su casa". Él solo vive alquilado y en cualquier momento se muda y ya. Pero el súper… ¡Ay, el súper! Ese tiene que lidiar con todo y con todos, a veces tiene que soportar ser insultado por el japonés y por el latino a la vez y buscar por todos los medios la forma de resolverle la vida a ambos. Como decimos en Dominicana "¡va forzado!".
El espíritu y el cuerpo no se van a comprender ya que tienen intereses diferentes. Tratar de ser intelectual con las cosas espirituales es más difícil que hacer bailar merengue a un japonés. Lo espiritual se vive, se siente, se expande, se asimila y crece. La mente no está para andar buscando soluciones sino para aplicar las orientaciones que le llegan desde el plano espiritual, ella es el puente comunicacional entre el cuerpo y el espíritu. La clave de todo radica en la armonía entre estos tres planos y, créeme, el orden divino ya tiene todo solucionado de antemano. Lo importante es creer que en verdad ya todo está solucionado, y para comprobarlo solo tienes que vivir en armonía contigo mismo en los tres planos: el físico, el mental y el espiritual.