27 de diciembre de 2014

Epicuro de Samos y el epicureísmo.


Epicuro de Samos (341-270 A.C.) fue un filósofo griego de la era helénica. Fundó la escuela El Jardín, cuna del epicureísmo como doctrina filosófica, alrededor del año 307 A.C. Fue el primer filósofo que aceptó a las mujeres como alumnas de su escuela como parte de la regla y no como una excepción. También admitió a los esclavos como miembros de la misma, propugnando la igualdad entre los hombres. La doctrina epicureísta creía en el placer, la tranquilidad  y la felicidad por encima de todas las cosas. Para los epicureístas el hombre debía evitar el dolor, el miedo  y el sufrimiento, buscando disfrutar una vida plena y feliz, cultivando la amistad, la libertad y una vida basada en el análisis de las cosas, pues consideraban que el conocimiento pleno del funcionamiento de todo lo que compone el mundo era la manera de obtener la paz de vida a la que todo hombre debía aspirar para ser feliz. También creían en llevar una vida simple y moderada y que debían hacer lo posible para que su felicidad y tranquilidad fuera transmitida a todos sus semejantes. Argumentaban que los dioses, creadores de la tierra y el universo, no se inmiscuían en la vida de los hombres sino que los observaban desde la bóveda celestial y que cada hombre era responsable de su propia existencia. Para ellos Dios no podía ser parte de este plano material en que vive el hombre, porque de lo contrario el mundo no tendría tantos males. Su filosofía se basaba en la teoría de que la distinción moral entre lo bueno y lo malo era determinado por el placer y el dolor: “lo que es bueno es lo que es placentero y lo que es malo es doloroso”; y que el razonamiento moral era una cuestión de cálculos entre los beneficios y costos del placer y el dolor. Erróneamente, algunos piensan que los epicúreos abogaban por la búsqueda desenfrenada del placer, pero su objetivo principal era la ausencia del dolor y del sufrimiento, pues consideraban que cuando el hombre no tiene dolor alcanza un estado de paz mental perfecto, al que los griegos denominaban ataraxia, y la necesidad del placer dejaba de existir, lo cual constituía el fin último de la existencia humana. Advertían que había que evitar los excesos, ya que estos a menudo llevan al dolor, y que el hombre debía minimizar los daños y maximizar su felicidad y la de los demás.  La escuela epicureísta funcionaba como una comunidad de amigos que vivían en armonía, sin embargo tenían principios básicos sobre los cuales sus miembros debían jurar, y entre ellos existía un sistema jerárquico de niveles. Su influencia en la filosofía helenística fue tal, que durante mucho tiempo se desarrolló de manera creciente en toda Grecia, teniendo como competencia al estoicismo, hasta que ambas doctrinas fueron en declive con el crecimiento del cristianismo. La Biblia habla de cómo el apóstol Pablo predicaba el cristianismo en la plaza mayor de Atenas y disputaba con filósofos epicúreos y estoicos, anunciando las Buenas nuevas de Jesús y la resurrección, lo cual motivó que los filósofos griegos llevaran a Pablo al Areópago para que explicara lo que para ellos era una nueva doctrina, a lo que Pablo les señaló que el altar que entre sus monumentos ellos destinaban “AL DIOS NO CONOCIDO” se refería a Dios, creador del mundo y de todas las cosas que hay en él (Hechos 17:16-34).
Un factor determinante para que el epicureísmo sucumbiera ante el cristianismo fue la conversión del emperador romano Constantino (272-337) a la doctrina cristiana, ya que este promulgó leyes que designaban al cristianismo como la religión oficial en el imperio romano (año 313 D.C.) y declaraban al epicureísmo como incompatible con la fe cristiana. Hubo de pasar mucho tiempo antes de que este movimiento filosófico volviera a ser rescatado por sus adeptos.
La historia registra a diversos personajes que se han declarado como seguidores del epicureísmo, entre ellos están: Lucrecio (94-55 A.C.); Pierre Gassendi (1592-1655);Thomas Jefferson (1743-1826);Jeremy Bentham (1748-1832); John Locke (1632-1704); John Stuart Mill (1806-1873); Karl Marx (1818-1883); y Friedrich Nietzsche (1844-1900).
El principal propagador del epicureísmo fue su alumno Metrodorus de Lampsacus (331-277 A.C.) quien adquirió fama por la divulgación que realizó de dicha doctrina. Luego de la muerte de Epicuro, las escuelas de enseñanza de la doctrina epicureísta siguieron creciendo en toda Grecia y en diferentes países del mundo antiguo por alrededor de 400 años. Epicuro ha sido catalogado como un filósofo materialista, empirista, atomista y hedonista, quien tuvo un papel importante en el desarrollo de la ciencia y el método científico, puesto que no creía en nada que no pudiera ser probado mediante la observación directa y la deducción lógica. A pesar de haberse considerado a sí mismo como autodidacta, estudió bajo la tutela de Nausiphanes por algún tiempo durante su juventud, y muchos entienden que recibió una marcada influencia de la doctrina de Demócrito, filósofo griego de la era presocrática, quien habló del atomismo mucho antes del epicureísmo.
Epicuro de Samos vivió acorde a la doctrina que profesaba. Su casa era simple, poseía la ropa básica y su dieta se limitaba al consumo de verduras, pan, aceitunas y agua. Aún durante el tiempo de sus padecimientos renales y otras complicaciones de salud siempre conservó su actitud tranquila y alegre, sin demostrar preocupación alguna, actitud que conservó hasta el día de su muerte.

12 de diciembre de 2014

Ignorancia... mal contra la humanidad.


Si hay algo peor que la ignorancia, es la ignorancia que no reconoce lo que ignora.

Cuando una persona sabe que ignora algo, pregunta, indaga e investiga hasta encontrar la verdad. Cuando una persona desconoce su ignorancia, hasta sus palabras más educadas suenan confusas y extraviadas.

Ignorar no es un pecado, tampoco es un delito. No querer erradicar la ignorancia de la humanidad sí es una actitud pecadoramente criminal.

La ignorancia es el alimento de aquellos que no han aprendido a vivir la vida plenamente.

27 de noviembre de 2014

Esoterismo.


El cultivo de lo esotérico es el arte de vivir en el espíritu, es ser conscientes de la energía constante del plano espiritual. Esto puede resultar impenetrable o de difícil acceso para la mente. El conocimiento de las artes esotéricas estuvo reservado durante miles de años a un linaje escogido de la especie humana. En sus albores era transmitido exclusivamente de manera oral a unos pocos iniciados de las escuelas filosóficas esotéricas. Hoy en día conviene suministrar alimento espiritual a toda criatura.
El esoterismo se ha transmitido durante siglos en todas las religiones y movimientos espirituales que componen la historia del hombre. Es un estilo de vida donde todo es nuevo cada día, no se intenta reducir lo infinito a dos páginas de un libro… se crea, se transforma y se crece constantemente. No es un conjunto de reglas que deben seguirse  de manera rígida o estricta sino todo lo contrario, se basa en la comunión con el orden divino. Las religiones se caracterizan por tener reglas que rigen las conductas de sus miembros como forma de cumplir un cometido, el esoterismo entiende al ser como parte del Orden Divino. El hombre crea el ambiente más conveniente para su propio bienestar y esto lo logra mediante una relación armoniosa con lo establecido. Sembramos conscientes de que nuestro modo de vivir dictamina lo que habremos de cosechar. Estamos reproduciendo materialmente en este instante lo que ya hemos decretado en el plano espiritual. Las reglas humanas  no inciden en lo espiritual y es por eso que los grandes movimientos esotéricos del mundo están formados por personas que profesan diferentes religiones, porque encuentran el punto de convergencia espiritual que los une. Siempre conscientes  de que cada ser vive su propia experiencia comunicativa con la creación. Más que juicio es comprensión; más que conocimiento es entendimiento; más que enseñanza es aprendizaje; más que desarrollo es crecimiento. En resumen: Comprender, entender, aprender y crecer. La transformación del ser es constante, por eso no se ciñe a reglas fijas, y alcanza la plenitud al estar en comunión perfecta con el Orden Divino.

10 de noviembre de 2014

Marina Frías: artista, versátil, mujer.


Ella tiene el encanto y glamour que poseen las damas delicadas. El talento prodigioso que sólo ostentan personas privilegiadas por la vida, y una fuerza colosal para entregarse a cada proyecto que emprende. Es el tipo de mujer que hace a uno preguntarse ¿por qué no la han nombrado Ministra de Cultura? Quizás el Ministerio de la Mujer sería un lugar ideal. Así podría servir de ejemplo a la mujer de hoy que necesita orientación, a la mujer de ayer que anhela creer que la semilla hogareña y educacional que sembró no se ha perdido, y sobre todo a la mujer de mañana que desconoce todo lo que una verdadera mujer puede hacer. Su nombre es Marina Frías, un nombre que de sólo escucharlo te da la sensación de que están hablando de alguien que conoces personalmente, aunque ese no sea el caso. No es para menos, desde 1984 a la fecha ella ha conquistado todas las facetas del arte dominicano con su gracia y la magia de su voz. Locutora, escritora, productora de radio y televisión, cantante, actriz, periodista… todo eso sin descuidar nunca su papel de esposa, madre, hija, y buena amiga. Ha laborado en algunas de las más prestigiosas emisoras radiales dominicanas: Radio Disco, la Z 101, Radio Listín, la Voz del Trópico, Hits 92, Y KQ94. Su paso por la radio le ha otorgado el ser galardonada por el Círculo de Locutores Dominicanos como Locutora comercial en nuestra nación entre los años 1994 y 1995, obteniendo el premio “Micrófono de Oro” durante esos años de manera consecutiva. La televisión forma parte de su vida y Marina ha formado parte de la evolución de la televisión en las pasadas décadas: Radio Televisión Dominicana (actual CERTV), Telesistema, Telecentro, Color Visión, Cinevisión, canales 6, 21 y 35, son plantas televisoras que se han visto adornadas por la belleza y figura de Marina Frías desde los años ochenta hasta nuestros días. Debutó en televisión en 1986 en el programa “Cuánto Vale el Show”, del Caballo Mayor, Johnny Ventura. Desde entonces ha desempeñado todas las funciones existentes en el arte radial y televisivo desde presentadora hasta la producción general en programas como: la Súper Revista, Caribe Show, Dominicanísimo, ¿Y ahora qué?, Mañana Musical, Las Frías a Nivel, En Familia, Cada Mañana con Freddy Aguasvivas, Sonidos del Planeta, A Nivel, y actualmente da vida a su programa radial “Tendencias DR”, por Quisqueya FM. Un programa cuyos seguidores demandan que Marina lo lleve a la televisión por su contenido fresco y moderno que combina lo contemporáneo con lo conservador y tradicional.
No hay forma de escribir la historia de la radio y la televisión dominicana sin mencionarla. Solamente hay que escuchar los nombres de los connotados presentadores y locutores quisqueyanos con quienes esta diva del arte nacional ha trabajado de manera conjunta en diversas épocas: Domingo Batista, el Súper Frank, Willie Rodríguez, Iván Ruiz, Freddy Aguasvivas, Sommer Carbuccia, Pedrito Núñez del Risco, Miguel Calzada, Francis Moya… Estamos hablando de las Grandes Ligas de la comunicación dominicana, porque ese es el nivel al cual ella pertenece. Los hechos hablan por un millón de palabras.
Si no hubiera amado tanto la locución, probablemente fuera hoy por hoy una de las más conocidas cantantes dominicanas en el globo terráqueo. Después de graduarse de canto en la escuela de Henry Ely, formó parte del grupo de cantantes fundadores de la orquesta Altamira Banda Show (1987), llegando a elevar su canto merenguero en diferentes playas extranjeras: Puerto Rico, Panamá, Miami, Venezuela, etc. donde insistentemente sonó el tema “Besitos de leche condensada”, interpretado por Marina. Durante ese tiempo recibió reconocimientos en la televisión nacional de manos de Freddy Beras Goico, Roberto Salcedo, y Rafael Corporán de los Santos, por el gran trabajo desempeñado junto a la banda. José Guillermo Sued impulsó su carrera de solista desde el programa televisivo “Sabadísimo”, inicio de una nueva etapa de su vida interpretando distintos géneros musicales: baladas, boleros, rock, pop, y bachata. Siendo invitada a cantar en eventos internacionales de envergadura como: La Feria de Colón (Panamá), y el Miss Cuban American (Miami), entre otros, llegando a recibir ofertas para formar una orquesta donde ella sería la figura principal. En su rol de actriz ha participado en varias obras teatrales y desempeñó diversos papeles para el especial televisivo “Grandes Series Dominicanas”, de Alfonso Rodríguez. Pero su gran pasión es la comunicación y es en esa faceta donde Marina Frías se siente plenamente identificada con ella misma.
Su familia es el más grande e importante premio que la vida le ha dado. Su esposo, Carlos Mario Echenique, ha sido el cómplice perfecto con quien Marina ha compartido todas y cada una de sus aventuras. Carlos Mario estuvo con ella en Altamira Banda Show, donde además de cantante y compositor se desempeñó como arreglista y músico. Poseedor de grandes virtudes en el área musical, ha representado para Marina la pareja soñada e ideal con quien ha logrado atesorar su hermosa familia que completan sus cuatro hijos, todos varones, y una niña que ambos adoptaron con mucho amor. Marina y Carlos Mario trabajan en la actualidad en impulsar la carrera musical de su hijo: Sergio Echenique, quien ya ha sabido conquistar corazones desde distintos escenarios y  en este instante le está dando los toques finales a su producción de baladas románticas, con la cual pretende seguirle el paso a sus progenitores en el arte nacional. Tener una trayectoria tan completa y conservar la sencillez y humildad que siempre la ha caracterizado es ya una hermosa cualidad de esta gran dominicana, de quien nos sentimos orgullosos. Marina es amante del mar y la naturaleza, varias veces al año se desconecta de la cotidianidad para irse al campo con su familia. Gusta de escribir novelas, lo hace desde que era una niña. Otra faceta suya que dará a conocer Marina en un futuro no muy lejano si así Dios lo permite. Que el Señor bendiga hoy y siempre a nuestra querida Marina Frías.

 

 

7 de noviembre de 2014

¿Quién es dueño de tu vida?

Filósofos, científicos, psicólogos, pensadores, sabios, psiquiatras, religiosos, gente común… muchos se han preguntado alguna vez si en realidad tienen un libre albedrío. Hay quienes defienden la teoría del determinismo y argumentan que el hombre no puede hacer nada más que lo que está señalado que él ha de hacer. Existen corrientes de pensamientos que postulan ideas acerca de la imposibilidad de que el hombre pueda tomar sus propias decisiones y dicen que su metabolismo, la genética, el país donde viven, la conducta adquirida, etc. Son los factores que determinan el camino que un hombre toma durante su existencia. Estos últimos aseguran que en base a esos datos es probable que pueda predecirse el futuro de un hombre cualquiera. ¡Vanas ilusiones!
La verdad es que el hombre tiene las limitaciones en las que el mismo cree. Solamente hay que probar cosas nuevas, desconocidas, para darse cuenta que, si a uno le gusta lo que ha probado, no había forma posible de que probar ese algo nuevo fuera algo que estuviera programado en nuestros genes. Por ejemplo: una persona a quien nunca le han gustado los deportes pero sí le agrada llevar una vida hogareña y tranquila. Si esa persona decide que en este día hará algo nuevo en su vida, practicar natación, aprender judo, montar bicicleta o correr, cualquier tipo de deporte… es probable que en muy poco tiempo esta persona note los beneficios que esta nueva actividad aporta a su existencia: se siente más fuerte, más ágil, piensa mejor y tiene la mente más clara y reposada. A partir de esos descubrimientos se ve obligado a admitir que le gusta el cambio que siente y decide que seguirá practicando ese deporte indefinidamente. ¿En qué parte de los genes podría estar encerrada la orden o programación que haría a un hombre tomar tal decisión? En ningún lado. Por el contrario, la ciencia ha demostrado que nuestros genes pueden ser cambiados dependiendo el estilo de vida que llevamos. Esto quiere decir que aún nuestra herencia genética está sometida a nuestras decisiones. Piénsalo bien. ¿Cuándo fue la última vez que te atreviste a hacer algo diferente?Atrévete hoy a retar los patrones mentales que has formado a lo largo de tu existencia y haz algo diferente, algo que aporte calidad a tu vida o al menos que aporte variedad, que te ayude a mantenerte más fuerte y sano sin causarte daño alguno. Prueba varias cosas diferentes en ese mismo tenor y descubrirás que aún tú mismo todavía no te has conocido al cien por ciento. ¿Sabes por qué? Porque eres un mundo infinito de posibilidades. No te compares con un caminito estrecho cuando puedes ser dueño de tu propio universo. Ejerce tu libre albedrío y atrévete a vivir.

5 de noviembre de 2014

Siembra el bien... cosecharás el bien.

El bien es la semilla que sembramos cuando beneficiamos a alguien con nuestros pensamientos, palabras, acciones e inacciones. Una semilla que habrá de germinar y dar sus frutos, porque así es la naturaleza del bien. Haz siempre el bien sin esperar gratitud ni recompensa que provenga de esas personas a quienes haces bien. A veces los seres humanos tienen el hábito de olvidar esos momentos duros en que tuvieron que ser ayudados por otros… es un mecanismo de protección que usan las mentes débiles. Por eso es que a menudo también se pretende olvidar a aquellos que han hecho el bien. Si ayudas a otros y te pagan mal, pídele a Dios que te dé muchas más cosas con las cuales puedas seguir ayudando a muchas más personas, aunque estas también se olviden de tus buenas acciones. Las semillas que has sembrado habrán de florecer tarde o temprano. Es ley de vida y nadie puede evitarlo. Sólo ten presente que es mejor dar que recibir. Haz el bien y no mires a quien.

4 de noviembre de 2014

No te subestimes.

Tú, al igual que todos los seres, tienes la capacidad espiritual de ver la respuesta. Tienes el poder de ver las intenciones de todo el que habla o escribe. No te subestimes. Ese poder infinito no solo está dentro de ti sino que está en todos lados pues es omnipresente. No es por méritos tuyos sino que es gratuito. Eso sí, tienes que elegir aceptarlo, usa tu libre albedrío para decidir y una vez estés en el camino lo tendrás todo a tu disposición.

29 de octubre de 2014

¿Usted qué piensa?

Cuando pienso, no quiero buscar lo que yo pienso. Mas bien encuentro lo que no pienso, dando apertura al discurrir de mis pensamientos. Si creyera pensar en lo que pienso, entonces no estaría pensando sino que estaría repitiendo en mis pensamientos aquellas cosas que ya antes he pensado. Pretender pensar sobre lo pensado es sólo recordar el pasado, tan fútil como caminar en redondo sin llegar a ningún lado. Como el cachorro que quiere llegar a morder su cola que nunca alcanza, pero igual lo intentará de nuevo mañana, y pasado mañana, y… nada. Eso es ese tipo de ficticio pensamiento, una inexistencia que sólo tiene utilidad si quiere recordarse lo aprendido, como cuando queremos recordar como hacer algo que ya una vez hicimos, pero eso es recordar, no es un verdadero acto de pensar. El único pensamiento, auténtico y real, ocurre en el brevísimo espacio de tiempo en que absorvemos el conocimiento universal que trasciende nuestros propios pensamientos. Discurrir en el pensamiento es el contacto eterno con lo que no se conoce, es la única manera de crecer, todo lo demás es embriaguez mental que satisface los incomprensibles deseos de creerse vivo, creerse que está pensando.

25 de septiembre de 2014

Del feudalismo a nuestros días.

El diccionario define la palabra feudo como: "Contrato por el cual los soberanos y los grandes señores concedían en la Edad Media tierras o rentas en usufructo, obligándose quien las recibía a guardar fidelidad de vasallo al donante, prestarle el servicio militar y acudir a las asambleas políticas y judiciales que el señor convocaba". Gracias a esta figura jurídica denominada feudo, existe un período de la historia de la humanidad a la que se llama "feudalismo". Dicho período, por lo general, se refiere a los cientos de años comprendidos entre los siglos VIII y XVI, aunque existe constancia de que este tipo de relación ya existía en la antigüedad y se ha prolongado hasta nuestros días, a pesar  de que tengan y hayan tenido nombres distintos.

Para el filósofo Carl Marx, el feudalismo fue tan sólo el sistema político implementado entre el esclavismo y el capitalismo. Es decir, para Marx el feudalismo fue una especie de transición desde los tiempos de la esclavitud opresora hasta los tiempos de la esclavitud moderna a la que llamamos capitalismo. En otras palabras, el feudalismo es otro nombre dado al esclavismo debido a que las reglas del juego variaron durante aquella época. Durante ese tiempo, los campesinos debían cultivar la tierra, pagar tributos al señor feudal por usufructuar dicha tierra y pagarle impuestos también por habitar en la tierra que el señor feudal le prestaba. Esto además de tener que defender con su vida cualquier invasión o ataque que amenazara la estabilidad del poderío del señor feudal.

Los señores feudales eran individuos que gozaban de privilegios especiales frente al rey, de quien eran feudatarios. Estos individuos pertenecían a la nobleza o a la iglesia. Los primeros construían castillos y/o fortalezas en las tierras que el rey les concedía en virtud del contrato freudal , siempre y cuando cumplieran con el juramento de lealtad que estos hacían al monarca, mediante el cual se comprometían a defender el reino y a ejercer dominio sobre el pueblo, de quienes debían cobrar los tributos e impuestos. Un papel similar jugaban los señores feudales eclesiásticos. Estos construían catedrales, monasterios e iglesias en sus dominios, pero su trabajo consistía en "salvar almas", y por lo tanto era la misión de mayor importancia en el reino. Ellos también debían dar al rey una parte de sus recaudaciones, pero su principal labor era asegurarse que el pueblo viera a los reyes como personas elegidas por Dios, embajadores de Dios en la tierra y merecedores de obediencia, veneración y respeto.

Los burgos, ciudades construidas por artesanos y comerciantes en las periferias del reino, y de donde proviene la palabra "burgués", fueron puntos claves en la desaparición del feudalismo. Esto ocurrió debido al poder económico que los burgueses obtuvieron comercializando las mercancías fabricadas por ellos. Estas personas no cultivaban la tierra para pagar tributos sino que pagaban en metálico, en moneda de la época, por esa razón se fue debilitando el sistema político feudal para luego pasar al nacimiento del capitalismo.

La historia nos enseña que el comercio otorgó al hombre cierta clase de independencia que le ayudó a vivir con mayor dignidad. El aprender oficios y a fabricar artesanía que otros necesitaban y requerían, les permitía a los burgueses contribuir al dinamismo económico del reino, al mismo tiempo les ofrecía un mejor estilo de vida. Si la evolución económica del hombre hubiera seguido ese camino las cosas serían muy distintas hoy en día. Para empezar: habría más igualdad económica entre los seres humanos, esto significa que habría más calidad de vida aún para los menos privilegiados; el poder del estado no se concentraría en un presidente o partido político sino que tendrían que formarse grandes consejos en los cuales los habitantes productivos de una nación tendrían una voz y un voto de importancia en cada una de las decisiones que se tomaran en beneficio de la nación; habría mayor respeto entre las clases sociales, de hecho no importarían las denominadas clases sociales, puesto que la independencia económica del hombre también se reflejaría en la independencia mental necesaria como para no dejarse controlar mecánicamente mediante la radio, televisión, internet, periódicos, etc. Como sucede actualmente. Pero no fue así. Hoy en día los instrumentos de labranza del pueblo se llaman: computadoras, automóviles, cajas registradoras, montacargas, y cualquier herramienta que los poderosos señores feudales utilicen para poner a producir a sus vasallos y esclavos.

El comercio otorga independencia al hombre. Es aconsejable que una persona aprenda a: fabricar zapatos, coser vestidos, cocinar y vender comida, fabricar cualquier accesorio que el hombre consuma o necesite cotidianamente, vender cualquier mercancía de lícito comercio, antes que esclavizarse en una factoría u oficina para cobrar diez mil pesos dominicanos cada mes, de los cuales difícilmente pueda ahorrar un solo centavo. Estas son las cosas que debemos aprender de la historia.

8 de septiembre de 2014

Cuco Valoy... un brujo con su propia "Tribu".


Los que tuvimos el privilegio de crecer mirando sus presentaciones televisivas difícilmente podamos evitar el sentirnos agradecidos de haber sido testigos de tal derroche de talento, grandeza y humildad en una sola persona. Cada presentación de su orquesta es, definitivamente, una caja de sorpresas: su peculiar manera de bailar, la dramatización de cada uno de sus temas, su canto y, sobre todo, su entrega, hacen de Cuco Valoy uno de los más completos y espectaculares artistas de toda la historia musical dominicana. Merengue, son, cumbia, boleros, salsa, guaracha… la Tribu de Cuco Valoy lo ha tocado todo.
Nació en Santo Domingo en el año 1937. De niño, en su natal Manoguayabo, cantaba de “loma a loma” a una muchachita llamada Colombia de quien estaba enamorado. Ya en aquellos tiempos tocaba los instrumentos de percusión, lo cual motivó que en cierta ocasión lo invitaran a sustituir al percusionista Manuel Merejo, quien era miembro del sexteto que amenizaba las fiestas en su región. Como no tenía zapatos, tuvo que tocar escondiendo sus pies detrás de los instrumentos. Le pagaron 75 centavos por tocar aquella fiesta. Siendo ya adolescente, en los años cincuenta, salió de su hogar paterno, en contra de su padre, para mudarse solo en los predios de Villa Juana, barrio capitalino donde vivió largo tiempo de su vida. Él quería un destino diferente al de trabajar siendo obrero por el resto de sus días, así que estudió música en el conservatorio nacional. Fue seguido luego por su hermano Martín, su compañero de aventuras musicales, a quien comunicó que dejaría de cantar boleros para dedicarse a cantar son, esto debido principalmente a la gran influencia que el grupo cubano “los Compadres” ejercía sobre el gusto musical de la época, pues habían visitado Santo Domingo en esos tiempos. A partir de entonces puso el bolero a un lado e inició su carrera en el son. Cuco Valoy y su hermano Martín formaron un dúo llamado el “Dúo Valoy”, tocaban fiestas cantando las canciones de “los Compadres”, y en cierta ocasión en que se encontraban tocando en una emisora radial de Santo Domingo fueron bautizados como el dúo “los Ahijados”, por un locutor apellido Ferrera, quien dijo: “Si en Cuba están los Compadres, pues aquí tenemos a los Ahijados”. El primer tema que Cuco grabó fue: “Enséñame el lunar”, pero ya contaba con una larga trayectoria haciendo música popular.   Su nombre pronto brilló en playas extranjeras. Nueva York acogió de buen modo esa famosa canción de la revolución que Cuco Valoy grabó durante la etapa de la historia dominicana que precedió al golpe de estado de 1963. Fue convertida en un tema musical obligado entre los compatriotas exiliados en esa gran urbe norteamericana.

En los años sesenta tenía una pequeña tienda de discos, enterándose que estaban vendiendo una emisora radial, sacó los 13 mil dólares que tenía ahorrados en el banco e hizo una oferta para comprarla, pero sólo consiguió que se la arrendaran. Sin instrucción ni experiencia en el área de la locución, pero con un vasto conocimiento de la música gracias a los años frente a la tienda de discos, Cuco Valoy  se pasaba horas ante el micrófono, animando a la gente y poniendo la música de moda. Se denominó a sí mismo el “Super suki sabrosón”, y entre sus lemas decía que él era “el que más sabía de música tropical”.
En el año1975 se propone  incursionar en el merengue, porque siempre ha sido un perseguidor de las cosas que están en el gusto popular, de las cosas que están sonando. Hasta entonces había sido observador pasivo de la competencia que libraban Johnny Ventura y Wilfrido Vargas, así que decidió que sería él quien llegaría a dirimir el conflicto musical entre estos dos colosos del merengue. De ese modo nació su orquesta: “Cuco Valoy y sus virtuosos”, que, escoltada por el piano y los arreglos de su hijo Ramón Orlando Valoy, con una gran destreza en el piano, aunque era apenas un muchacho, y complementada por la peculiar voz de Henry García como voz principal de la banda, ya estaba todo listo para lanzarse al ruedo. En una presentación de Cuco en el teatro Agua y Luz, recibió tal acogida por el público que al día siguiente la prensa reseñaba un comentario hecho por Johnny Ventura en el cual señalaba que ya Wilfrido no era su problema sino una orquesta ´dirigida por Cuco Valoy, llamada los Virtuosos.
Comenzó grabando con el sello Kubaney Records, del cubano Mateo San Martín. Su primera producción discográfica la hicieron en el estudio Latin Sound, donde también se grababa toda la música de la Fania All Star. Cinco temas fueron cantados por Henry García y uno por el propio Cuco, quien lo escribió una de esas noches en las que trabajaban en el Latin Sound, y fue arreglado por Ramón Orlando, porque Cuco quiso aprovechar el poder grabar su voz en un estudio tan moderno. Tiempo más tarde surgieron algunos desacuerdos entre Cuco y San Martín, lo cual motivó que Valoy decidiera formar tienda aparte, enterándose sorpresivamente que el nombre de “los Virtuosos” había sido registrado por el empresario cubano. Durante una gira llevada a cabo por Panamá, contratado por el empresario William Liriano, este último sugirió que la orquesta de Cuco Valoy parecía una tribu, esto por los saltos y vueltas que desde siempre han caracterizado a Cuco en cada una de sus actuaciones. De ahí nació el nombre de “La tribu de Cuco Valoy”. En apodo de “el Brujo”, proviene de algunos merengues grabados por la Tribu en los que se satirizaba la actuación de los brujos y curanderos que buscaban “despojar” a sus clientes mediante un “ensalmo”, que desembocaban en temas muy jocosos que la gente repetía por doquier, con frases como: “Señora él tiene otra que le está prendiendo vela, para que salga de usted y la quiera más a ella…” .
Hablando acerca de su hijo, el boxeador Tommy “Cañonero” Valoy, el merenguero dijo que para él la vida es algo así como una novela y que al parecer su hijo no nació para ser campeón mundial, porque él tenía todo el talento necesario y contaba con el apoyo de su familia, sin embargo se le atravesaban cosas distintas en el camino, que impidieron al Cañonero alcanzar la corona.
Siente tristeza al hablar de su hermano Martín Valoy, quien está sufriendo de alzheimer, pues ellos dos son los más unidos de entre todos sus hermanos. Preguntado acerca de su opinión de la denominada música urbana, Cuco dijo que Dominicana está viviendo la peor época de su historia musical con lo que está sucediendo con nuestra juventud. En la actualidad está promocionando sus temas: “la Piedra” y “el Carrito”, y cuenta con el manejo de Luis Aponte.
Nota: Muchos de estos datos fueron obtenidos de la voz del propio Cuco Valoy al hablar en la entrevista que Ramón Pastrano le realizó en su programa: “Formalmente informal”, hace dos semanas.

12 de agosto de 2014

¿Buscando aprobación? ¡Quizás no sea lo mejor!

Disfrutar la mejor calidad de vida posible se hace imposible cuando se apoya la existencia propia en dogmas que se han convertido en muros que encierran y magnifican los ecos de tus pensamientos y de los enunciados de otras personas. Para comprender las posibles consecuencias de los ecos mentales tenemos que tomar en cuenta la necesidad de algunas personas de recibir aprobación de otros. Supe de una súper estrella del deporte que cada vez que bateaba un cuadrangular llegaba al lado de sus compañeros preguntándoles si se había visto bien cuando hizo contacto con la bola, preguntaba con tanta insistencia y tan frecuentemente que llegaba a molestar a sus compañeros de equipo. Son informes que la gente común no espera escuchar de un súper dotado del deporte, nadie podría imaginar que una persona con tales cualidades podría sentirse necesitada de aprobación, pero esas cosas suceden más frecuentemente de lo que pensamos. Ese atleta tan extraordinario terminó metiéndose en problemas con el uso de esteroides, todo porque él no terminaba de aceptar que ya él era lo que un día soñó ser, que nonecesitaba nada más y que la mayoría de sus colegas se habrían conformado con ser la mitad de lo que él era.

Generalmente esa dependencia de otros se adquiere en la infancia, en el hogar, en la escuela, en el sector donde esa persona creció… pero mayormente son los padres y familiares cercanos los que influyen directamente en que una persona, a pesar de sus talentos propios, crea necesitar la aprobación de otros para sentirse algo seguro de que lo ha hecho bien. Inclusive, dicha necesidad adquiere las mismas connotaciones de una adicción, ya que por lo regular, las personas que necesitan la aprobación de otros, tienden a preguntarle a cada vez mayor número de otras personas acerca de la validez o efectividad de sus propias decisiones o acciones. Si esa persona en vez de aprobación recibe un comentario negativo, lo repetirá tantas veces en su mente que en ocasiones corre el riesgo de caer en depresión. No es lo mismo preguntarle a un experto o especialista acerca de un tema sobre el cual no tenemos conocimiento cabal que detener a cualquier compañero de la oficina y cuestionarle acerca de la conveniencia de invertir en la bolsa de valores. Debemos recordar que en los asuntos delicados siempre es recomendable buscar una segunda opinión entre expertos, porque aún los más expertos pueden equivocarse. El detalle aquí es conocerse a uno mismo, confiar en que se está siempre haciendo lo mejor que se puede y que incluso los asuntos que ameriten corrección no necesariamente significa que se han realizado de manera incorrecta sino que podría añardírsele algo más para que esté completo o salga mejor. Si esperas la aprobación de otros quizás nunca la recibas. Confía en Dios, confía en ti y haz que tu vida sea tu mayor aprobación.

10 de agosto de 2014

Muros mentales que repiten el pensamiento.


Muros mentales que producen ecos.
Si vivimos tantas experiencias diarias que a menudo pasan desapercibidas, ¿Por cuál razón algunas experiencias parecen quedar marcadas en la mente de la gente? Es cierto, algunas personas tienden a ser víctimas de los pensamientos repetitivos. En especial de aquellos que no les agradan o le molestan. ¿Por qué sucede de esa manera? Para entenderlo mejor es recomendable que llamemos  a cada cosa por su nombre o, en su defecto, le designemos uno. Llamaremos “eco” a esos pensamientos insistentemente repetitivos que “parecen” cobrar vida en las mentes de aquellos que así lo han permitido. Así como el pensamiento repetitivo no es más que un recuerdo que carece de valor real, así mismo, dichos recuerdos encuentran muros mentales en el interior de la mente sobre los cuales seguir resonando, rebotando, repitiéndose una y otra vez. 
Humanamente hablando, mucha gente alberga en su mente un gran número de creencias y dogmas infundados, la mayoría de ellos infundidos dentro de sus propios hogares o por amigos cercanos en los cuales dichas personas confían. Esos dogmas o creencias son los muros en los cuales se apoyan las características principales de las personalidades de estos individuos. Estos muros también llevan a cabo la infame labor de limitar la creatividad y energía de esas personas, debido a que fueron socialmente construidos en etapas tempranas de sus vidas o por personas que ejercen cierto tipo de autoridad innegociable en sus existencias. Por ejemplo: si a una mujer le han hecho creer que el hecho de tener unas cuantas libras de más le hace ver fea o le resta parte de sus encantos, si ella realmente lo cree y lo acepta, ese es un muro dentro de su mente que la mantendrá pegada a la pared y apuntándola con el punzante filo de una espada. Si a cualquier compañero de trabajo se le ocurre mencionarle, un día cualquiera, que ella luce como si estuviera ganando peso, aunque esto no sea verdad…¡El cataclismo! Se pasará el día preguntándole a sus amigas si ella se ve más gordita, repitiéndose que no debió dejar de asistir al gimnasio y mirándose al espejo cada vez que tiene una oportunidad de hacerlo. Ese pensamiento será el eco de ese día y quizás de varios más. Este tipo de suceso le ocurre a todas las personas que atesoran los mencionados muros en su mente.
¿Qué hacer en estos casos? Primero: entender que las opiniones de otros no tienen porqué convertirse en tu realidad. Eso incluye tanto a los muros antiguos como a los comentarios que dan vueltas en tu mente. Lo que otros piensan de ti es asunto de ellos. Tu realidad está por encima de todos los pensamientos pasados, incluso los tuyos. Si basas tu vida en pensamientos no verás tu realidad con claridad.
Segundo: Es tiempo de analizar esas viejas creencias y escudriñarlas con sumo cuidado. Aún los adelantos científicos de mayor contundencia en la actualidad pasarán a ser objetos obsoletos mañana. En el mejor de los casos serán modificados para ser adaptados a los tiempos modernos. Así que analiza con cuidado aquello en lo que siempre has creído, verás que muchas de esas creencias no forman parte de la realidad actual.
Y, Tercero: Desentraña la raíz de cada una de tus más profundas convicciones. Descubrir la fuente u origen de dicho dogma, si no es que ya lo sabes, resulta útil en estos casos. Te sorprenderás al darte cuenta de cuan insignificante es la base en la que has apoyado esas creencias. En muchos casos, cuando te hicieron creer que algo era malo o bueno, ni siquiera tenías la madurez mental para decidir si te convenía o no adoptar como tuyas las conclusiones a las que otros llegaron. El objetivo es hacer añicos esos muros e incrementar, al mismo tiempo, tu claridad mental. Si has albergado demasiados muros en tu mente es posible que te sientas aprisionado, limitado, inferior y engañosamente de poco valor. La psicología tradicional llama “complejo” a este tipo de mecanismo mental que provoca a un individuo sentirse afectado por comentarios o sucesos externos que son presentados ante su persona y que han pasado, con el tiempo, a ser parte de su experiencia de vida. En realidad esto es sólo un nombre dado a algo que no existe verdaderamente. Es solamente una creencia que ha adquirido solidez en tu mente debido a la constancia repetitiva a través del tiempo y nada más. Si no le das cabida, así mismo como vino, sin darte cuenta dejará de existir, porque eres tú quien le da importancia a esos muros en los cuales rebotan los ecos mentales. La realidad, la única verdad, es que el universo de posibilidades que tienes en la vida actual sobrepasa infinitamente todo lo que pudieras imaginar en este instante. Si puedes asimilarlo, entonces podrás entender que en tu naturaleza no cabe la opción de vivir encerrado entre muros mentales. El universo es tuyo, vívelo plenamente.

3 de julio de 2014

¿Qué es inteligencia?

Inteligencia es la capacidad que poseemos para entender las cosas. A mayor grado de inteligencia, mayor es el entendimiento que nos caracteriza. En ese sentido, un individuo inteligente a quien se le explica un asunto es capaz de entender lo que se le ha explicado e incluso identificar detalles faltantes en la explicación para luego formular las preguntas necesarias con el objeto de tener un entendimiento cabal del tema en cuestión. Inteligencia es también sinónimo de conocimiento y comprensión. No debe confundirse la educación con la inteligencia, es algo que las personas suelen hacer, aunque no es lo correcto. Puede darse el caso de que una persona no posea una educación formal y aún así posea una gran inteligencia. Esta es la razón por la cual los clásicos exámenes que miden el coeficiente intelectual son limitativos y sólo sirven para medir el desarrollo educacional de la inteligencia en una persona y no su inteligencia en sí. Cabe señalar que la educación contribuye a desarrollar el nivel de inteligencia pero la base natural de la inteligencia es algo con lo que cada cual nace. Durante mis años de observación, en lo que al presente tema se refiere, he conocido a decenas de individuos profesionales académicamente hablando cuyas inteligencias son prácticamente nulas. En cambio también he conocido a campesinos oriundos de lugares apartados que apenas saben leer y escribir, que poseen un grado de inteligencia superior. También es limitativo el considerar que la inteligencia es condicional a la capacidad de resolver problemas. Existen personas extremadamente inteligentes que tienden a bloquearse ante el más mínimo conflicto y eso los imposibilita de llegar a conclusiones que en otras circunstancias les resultarían sencillas de obtener. De igual manera, se ha generalizado el concepto de “inteligencia emocional”, pretendiendo con el mismo argumentar que se trata de cierto tipo de inteligencia especial que poseen ciertos individuos, lo cual no es cierto. Los sentimientos y emociones de cada individuo dependen y están condicionados por diversos factores y no necesariamente quien es capaz de controlar sus emociones sea más inteligente que otra persona muy sensible o de emociones frágiles. De hecho, diversos estudios han demostrado que los sicópatas tienden a no tener remordimientos ni emociones y al mismo tiempo son individuos generalmente muy inteligentes, mientras que otros estudios han demostrado que las personas que confían en los instintos que les dicta su corazón tienden a ser acertadas en sus conclusiones. Ambos extremos de dicha ecuación nos indican claramente que la inteligencia de un individuo no está proporcionalmente relacionada con los sentimientos ni con la emoción.
Otro aspecto que suele emplearse erróneamente a la hora de evaluar la inteligencia de una persona es su capacidad comunicacional y/o su forma de hablar. Así, si una persona es locuaz, y se expresa con fluidez, es probable que el común de las personas piense que se trata de un individuo muy inteligente, pero esto no siempre es así. Mas bien volvemos al tema de la educación que contribuye a cierto grado de desarrollo intelectual, no necesariamente estaremos frente a un individuo que posea un amplio equipaje de inteligencia en su base natural. Durante años he observado que hay personas con muy baja capacidad comunicacional que poseen una excelente claridad mental y por el contrario, individuos que se expresan de una manera muy correcta pero tienen limitaciones exageradas en cuanto al tema de la inteligencia se refiere.
No es de sorprenderse que existan tantos errores, que en la mayoría de los casos pueden ser catalogados como tabúes, en lo que se refiere a la evaluación y justa calificación de cuales personas son verdaderamente inteligentes. Los avances de la ciencia en el campo de la neurolingüística nos muestran que el ser humano crea imágenes mentales que relaciona con los términos empleados en el contenido de su lenguaje, este punto es claro y sin ningún tipo de contradicción. Ahora bien, para la realización del presente estudio he formulado una pregunta a un gran número de personas, de diferentes orígenes y clases sociales. Una pregunta que a todas luces podría parecer sencilla y uno entendería que cualquier persona sería capaz de responder correctamente y sin titubeos. La pregunta en cuestión es: “¿Qué es inteligencia?” Cerca del 70% de las personas cuestionadas no supieron dar una respuesta clara y comprensible de lo que ellos entendían por inteligencia. Si tomamos en cuenta lo que dice la ciencia de la neurolingüística, es sencillo concluir que si una persona no está clara con respecto a un concepto determinado, en este caso el de la palabra inteligencia, tampoco estará claro a la hora de determinar quien es o no inteligente. Lo interesante de todo esto es que las personas que tuvieron un mayor margen de error a la hora de responder la pregunta son individuos con educación y que se consideran a ellos mismos como entes inteligentes. Es necesario señalar que una muestra tomada a menos de trescientas personas no puede ser considerada contundente ni poseedora de un carácter científico exacto, pero nos da una idea inicial de lo que podemos esperar encontrar en el camino. Lo que sí me quedó claro en torno a la pregunta formulada es que todas las personas extremadamente inteligentes que respondieron de manera segura tienen sus propias definiciones con respecto a lo que ellos entienden por inteligencia y no siempre están literalmente ceñidas a la definición formal que encontramos en los diccionarios o en libros de psicología, aunque en el fondo los puntos convergentes de sus definiciones con las acepciones formales fueron obvios y tangibles. Lo ideal es que cada persona procure ver dentro de sí mismo para que conozca la potencia y limitaciones de su propia inteligencia. Entonces, y sólo entonces, podrá ser capaz de entender la inteligencia de las personas a su alrededor, y sobre todo, podrá tener claro en su mente el concepto de lo que es la verdadera inteligencia.

24 de junio de 2014

La experiencia personal del ser espiritual.

Soy un ser espiritual y no discuto con ateos. Esa decisión la tomé hace ya mucho tiempo, desde que me inicié en el estudio de lo espiritual y esotérico, siendo apenas un niño, entendí también que discutir acerca de la existencia de aquello que daba sentido a mi vida sería equivalente a discutir sobre mi propia existencia. Si alguien duda de la posibilidad de que yo pueda o no existir y me lo comunica, no puedo menos que sentir compasión por el estado de confusión en que habita esa persona, pero el ser compasivo no me obliga a escudriñar cada mente que no entiende que sería más sencillo simplemente ignorar algo que no existe en vez de invertir tiempo y energía en negar enfáticamente aquello en lo que no cree.
Sin embargo debo admitir que entiendo a los ateos. Sí, de verdad los entiendo. Entiendo que una persona no tiene capacidad para hablar sobre aquello que no conoce, si una persona no ha tenido o no ha sabido reconocer experiencias espirituales en su vida ¿Por qué habría de creer que es un ser espiritual?por eso entiendo a los ateos. Aunque reitero que no entiendo el porqué gastar sus energías intentando gritar al mundo su condición de ateo, pero puedo entender que solamente la experiencia espiritual puede convencer a un individuo de que él mismo es un ser espiritual y por ende está conectado a otros seres espirituales y a una fuente de energía espiritual que ha permitido su existencia.
Si miro en restropectiva, teniendo yo algunos seis o siete años de edad, compruebo que era un niño algo difícil de convencer en cuanto a las cuestiones que no me podían ser explicadas con claridad. Era yo entonces muy inocente para saber que no todas las personas poseen el talento o la capacidad de explicar detalladamente y con palabras las cosas que saben y conocen. Aunque algunas personas sí tienen el poder de explicarlo todo con tan solo una mirada, un abrazo o un apretón de manos, pero ese es otro tema. El asunto es que estando yo en la escuela bíblica, junto a mis hermanitos, era algo receloso respecto a muchas de las cosas que allí se decían. Probablemente aquellos recelos eran provocados por la advertencia de mi padre de no depositar mi confianza en personas extrañas, y yo entendía por extraño a todo aquel que no fuera mi papá, mi mamá, mis abuelos y algunos de mis hermanos. Por eso miraba a sor Pilar, aquella monja tan dulce, expresiva y cariñosa, con cierto aire de duda, cada vez que comenzaba a hablar acerca de temas inexplicables con palabras. Pensaba que quizás sus padres no le advirtieron acerca de los extraños y alguna persona pudo haberla inducido a confusión, aún así prestaba mucha atención a todo lo que ella decía porque ya sabía que la única manera de aprender o descubrir falsedad era prestando verdadera atención a las cosas que a uno le comunicaban. Pero ocurría algo increíble cada vez que yo salía de la escuela bíblica meditando sobre lo que acababa de escuchar, es que aquello sobre lo que yo meditaba se reflejaba en la vida real. Por algún tiempo pensé seriamente que se trataba del poder mental de crear cosas y situaciones imaginarias y llegar al extremo de creer que eran reales, y de verdad me atraía tener dudas, porque me agradaba despejarlas luego con evidencias tangibles. Fueron las experiencias vividas, principalmente aquellas ocurridas cuando yo no las había buscado, las que me mostraron indudablemente que soy un ser espiritual.
Ha llovido mucho desde la escuela bíblica. El gnosticismo, la metafísica, el epicureísmo, la filosofía en general, miles de libros, y un sinnúmero de otras fuentes, han puesto a prueba mi capacidad para creer y para dudar, pero al final solamente mi experiencia personal me ha permitido darme cuenta que soy un ser espiritual.

23 de junio de 2014

La juventud necesita de tu experiencia.

La juventud necesita orientación, muchos de los jóvenes que andan errantes en las calles, buscando problemas innecesarios lo hacen porque están desorientados. A veces una palabra sabia puede mostrar un camino diferente a los que no saben por donde dirigir sus pasos. Aunque muchos estén perdidos no todos lo están. Rescatemos a los jóvenes que todavía sirven, tengamos confianza en que no todo está perdido y que nuestra experiencia es la llave que abrirá las puertas a la oportunidad que necesita nuestra juventud..

Realidad de la familia dominicana.

Es la interminable lucha generacional en la que cada cual reclama para sí el título de la mejor generación: los de la tercera edad expresan que sus hijos, esos a quienes ellos les pagaron la universidad, no tienen tiempo ni siquiera para conversar con ellos, se sienten olvidados, y a veces lo son, incomprendidos y muchas veces son huéspedes involuntarios de algún asilo; Los adultos, mayores de 35, dicen no poder controlar a sus vástagos, que los jóvenes de hoy, en su mayoría, no sirven, que son una burda y desmejorada imitación de los acomplejados afroamericanos que insisten en descargar sus frustraciones en una música, mal llamada urbana que casi siempre dice absolutamente nada; los jóvenes de hoy, entre 10 y 35, escuchan ruidos a todo volumen al que quieren llamar música, dicen no entender el lenguaje de los adultos e insisten en creer que sus niños, los hijos de cada cual, son los niños más inteligentes del mundo sólo porque pueden navegar en la red utilizando un celular; los niños de hoy, menores de 10 años, pasan la mayor parte del tiempo entre seres extraños, lejos de sus padres, los confinan a un maternal antes de que puedan hablar, luego, cuando han crecido, los encierran en salas de tareas o en clases de arte o idiomas por donde sus padres los recogerán cuando casi se apague la luz solar, porque las madres de hoy no pueden criarlos, ellas tienen que trabajar y tener una actualizada vida social.
¿Cómo llegamos aquí?: los de la tercera edad creían en la disciplina férrea e innegociable, los muchachos no opinaban, el premio por obtener buenas calificaciones era no ser castigados y la inmensa mayoría de sus hijos son educados pero muchos de ellos quedaron traumatizados y siguen creyendo que no les es permitido conversar con sus progenitores; los adultos de hoy, comenzaron a decir que sus hijos no recibirían los golpes y férreas disciplinas que ellos recibieron, que sus hijos tendrían el poder de hablar y decidir hasta en la escuela que ellos querían estudiar, quisieron ser tan abiertos con sus hijos que les permitieron tutearlos, borrando la línea del respeto, lo que hoy en día ha desembocado en una generación sin límites ni control; los jóvenes de hoy aprendieron el arte de la manipulación y el chantaje para obtener lo que deseaban de sus padres que no los corregían debidamente y les daban tanto tiempo y dedicación que llegaron a empalagarlos, ignoran que el mundo ya estaba inventado por completo cuando ellos llegaron y piensan que las cosas seguirán llegando a sus manos como si fueran regalos; los niños son testigos de un mundo cuyas reglas se violentan cada día, un mundo en el que viven rodeados de las nanas que los cuidan, las profesoras del maternal y los aparatos modernos que inundan su vidas de tecnología.
Resultado.
Las personas son más vacías e insensibles cada día, la violencia es tan normal como el juego de pelota, la gente no cree en ellos mismos a menos que traigan puestos ropa de moda que sea costosa y puedan aparentar que tienen dinero aunque en sus casas no tengan ni un pedazo de pan, el respeto no existe entre las generaciones y a nadie le importa que todo por lo que tanto trabajó nuestro pueblo hoy en día se esté deteriorando a pasos agigantados.
¿Cuál es la solución?
La familia dominicana tiene que rescatar sus valores: la experiencia de la tercera edad hay que aprovecharla, las personas mayores tienen que aprender el uso de las computadoras y transmitir sus conocimientos, experiencias y sabiduría a todos los demás; los adutos de hoy tienen que entender que son ellos los que dominan el mundo, ellos tienen el poder adquisitivo y la fuerza para cambiar las cosas, porque los jóvenes viven entre nebulosas confusas producidas por el consumismo y la falta de metas específicas; los jóvenes tienen que prepararse, practicar deportes, amarse por lo que son y no por lo que tienen y pensar en el futuro de sus hijos y de nuestra nación; los niños necesitan amor de parte de todo el mundo, necesitan mucho cuidado y cariño, solamente así podremos esperar tener entes de provecho en el futuro inmediato.

14 de abril de 2014

El libre albedrío: Parábola del estudiante universitario.

El uso del libre albedrío es como cuando el Consejo de Educación Superior diseña un plan de estudios (pénsum) con todos los requisitos (asignaturas), que un estudiante, previamente matriculado en una escuela de altos estudios (universidad), deberá aprobar o cumplir antes de obtener un diploma que lo acredite como profesional. Algunas de esas asignaturas tienen prerrequisitos (asignaturas que deben ser aprobadas previamente). Por Ej. Si el estudiante no aprueba Filosofía 001 la universidad no le permitirá inscribir Filosofía 002. Existen otras materias o asignaturas que no tienen prerrequisito, y pueden ser inscritas en cualquier etapa de la carrera. Así tenemos que un estudiante de primer semestre puede inscribir una materia de sexto o séptimo semestre, siempre y cuando esta no lleve un prerrequisito, y obviar el inscribir los prerrequisitos que deberá cursar de todos modos tarde o temprano; o, se da el caso que el estudiante suspende los estudios y no se inscribe por uno, dos o más semestres. Esto al final terminará alargando el tiempo para que el estudiante obtenga su título profesional, porque lo ideal es que inscriba todas sus materias en el tiempo y orden correspondiente, de acuerdo a como aparecen en el pénsum.
Veamos la semejanza de lo aquí expuesto con lo que ocurre con la permanencia del ser en el plano físico: Existe un plan del Orden divino que el ser debe agotar o cumplir para elevar su nivel espiritual y continuar su camino en ascenso a niveles celestiales. A medida que el ser aprueba (vive, experimenta, recorre, entiende y asimila) el plan del orden divino, también va elevando su nivel de consciencia espiritual.
Ahora bien, tal y como en el ejemplo metafóricoel estudiante de la universidad decide qué inscribir, el ser también puede, en el trayecto de su ascenso espiritual,  obviar el gran regalo que significa ese plan prediseñado, porque el ser tiene un libre albedrío para decidir. Cuando el ser decide, aquí en este plano físico, obviar los pasos y experiencias que le corresponde vivir, ya sea por encerrarse en el plano mental (recuerdos, imaginación repetitiva) o por entregarse a los afanes terrenales (dinero, vicios, corrupción, placeres), se estanca, no avanza, no eleva su nivel espiritual.
Si el aliento de vida abandona al cuerpo físico del ser, sin este haber cumplido con los pasos que le corresponde, el ser verá dichos pasos en una encarnación posterior. No importa lo que el ser haga en esta u otra vida, de todos modos tendrá que recorrer el plan divino. Si el ser utiliza su libre albedrío para aceptar el regalo del plan divino, entonces irá tomando las decisiones convenientes para su crecimiento espiritual, en armonía plena con el Todo. Y aún si tiene que volver a encarnar en este plano físico, tendrá un nivel espiritual más elevado. A eso debemos el nivel de entendimiento que poseemos en la vida presente, porque hemos venido evolucionando. La conveniente utilización del libre albedrío es la reafirmación del nivel de consciencia en el ser. Si el ser no poseyera el libre alberdrío y fuera conducido como si fuera un autómata a través del plan  del Orden divino, sería equivalente a que permaneciera en la inconsciencia y no podría elevar su nivel espiritual.
El fin último del ser es superar todas las enseñanzas que le ofrece el plan divino y por consiguiente dejar de encarnar en este plano físico, entonces, cuando esto ocurre, el crecimiento espiritual, en lo referente a este plano material, ha sido completado, y el ser asciende a niveles superiores ubicados en otras dimensiones en las cuales no necesitará el cuerpo material.

10 de abril de 2014

El verdadero motivo para alabarse.


Así ha dicho Jehovah: "No se alabe el sabio en su sabiduría, ni se alabe el valiente en su valentía, ni se alabe el rico en sus riquezas. 24 Más bien, alábese en esto el que se alabe: en entenderme y conocerme que yo soy Jehovah, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra. Porque estas cosas me agradan, dice Jehovah”.
            Jeremías 9:23-24.
El juicio que el Señor otorga a los hombres es el que permite diferenciar entre lo bueno y lo malo, lo verdadero y lo falso, lo conveniente y lo perjudicial.
Su misericordia perdona las transgresiones cometidas por el ser humano, conscientes o inconscientes, porque solo él sabe escudriñar los corazones y por ende, solo él sabe las intenciones y el grado de arrepentimiento que existe en el interior de los hombres.
Su justicia otorga a cada cual lo que le pertenece o merece. No os llameis a engaño, todo lo que sembramos también lo cosecharemos. Por lo tanto sembremos amor y amor tendremos.
Sobre todo es imprescindible que busquemos el entendimiento de todo lo que viene de nuestro Creador. A él le agrada que tengamos ese entendimiento y que nos sintamos realizados y gritemos al mundo, a todo pulmón, que le conocemos y sabemos de él y sus cosas tan maravillosas.  

1 de abril de 2014

Albert Einstein pensaba que...


“No permitas que tu felicidad dependa de alguien, porque no siempre esa persona será como crees”.

“Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos”.

“Nunca consideres el estudio como un deber, sino como una oportunidad para penetrar en el maravilloso mundo del saber”.
Albert Einstein (n. Alemania 14 de marzo de 1879-m. Estados Unidos 18 de abril de 1955).

28 de marzo de 2014

Verónica Medina: Compositora, Merenguera y Baladista.


Si la fuerza y hermosura de su voz no fueran motivos suficientes para sentir admiración por esta extraordinaria cantante dominicana, entonces, el simple hecho de haber permanecido en el arte por más de treinta años sí lo es. Porque es un símbolo inequívoco de grandeza, coraje y determinación a vivir por lo que ella realmente ama… cantar para su público. Verónica inició cantando a los ocho años de edad en el programa televisivo “El Show de Altagracia Peña”, donde cantó cada semana por espacio de dos años. Participó en el programa de Papa Molina y Josefina Miniño, así como también en el de Elenita Santos. Desde que uno obtiene esos datos se da cuenta que su destreza interpretativa no es fortuita sino que recibió orientación musical a muy temprana edad, de la mano de algunos de los más encumbrados maestros del arte dominicano.  Fue el programa “Fiesta” de Teleantillas, a principio de los ochenta, donde Verónica deleitó a los amantes de la música romántica con su peculiar estilo de cantar baladas, fuerte y tierno a la vez, y desde entonces ha ocupado un lugar especial en el gusto popular dominicano. Años más tarde formó parte de la primera orquesta femenina de merengue en la República Dominicana: “Belkis Concepción y las Chicas del Can”, que tocaba todas las semanas en “El Show del Mediodía”. ¡Fueron unos tiempos inolvidables! Uno de mis merengues favoritos de toda la vida lo interpretó Verónica en esa etapa de su carrera: “Sin él”, autoría de Marco Antonio Solís y que también grabó en balada la mexicana Marisela, fue uno de los merengues que otorgó brillo a esa época dorada del merengue femenino. Otros temas como: “La vecina”, y varios más, fueron dulces pretextos para endulzarse la vida a ritmo de merengue con las orquestas femeninas, capítulo de nuestra historia musical en el que Verónica ocupó un rol protagónico. Famosos escenarios nacionales e internacionales fueron conquistados por Verónica en aquel tiempo. Durante varios años cantó al lado de los grandes del romance latinoamericano. Nombres como: Armando Manzanero, Basilio, Vicentico Valdez, Lucho Gatica, aparecían desplegados en afiches donde se anunciaba la participación de nuestra Verónica Medina como contraparte dominicana. El Maunaloa, Las Palmas del hotel Santo Domingo, el hotel Jaragua, D’Kalaff piano bar, vibraron en aquellos tiempos ante la espectacularidad de la voz de esta dama de nuestra tierra que no se deja amilanar por el tiempo ni las tempestades, pues todavía hoy canta, tan hermoso como ayer lo hacía y con la misma dedicación y valentía. ¡Cuánta valentía!

Dejando atrás los años con Belkis Concepción y con las Chicán, contrajo matrimonio y se fue a vivir a Europa, específicamente a Holanda, donde formó parte de la orquesta merenguera “Huracán”, integrada por músicos dominicanos, con la cual obtuvo premios y distinciones que le permitieron darse a conocer entre la comunidad latina y ganar admiradores entre el público europeo. En el 1995, ya posicionada en aquella nación, formó su propia banda: “Verónica Medina y su orquesta”, para seguir ganando el cariño del público en los festivales latinos allí celebrados y con la cual también grabó su primera y única producción completa hasta la fecha, con temas de su autoría, que llevó por nombre “Confiésalo”. Naciones como Austria, Alemania, Bélgica y Francia, recibieron la música dominicana con la voz y orquesta de Verónica, quien regresó al país a finales de los noventa con planes de establecerse definitivamente de nuevo en su tierra.
Algunos temas de su autoría: ”Tanta falsedad”, “Ese hombre es mío”, “Decídete” y “O te quedas o tevas”, formarán parte de esta nueva producción que está preparando VerónicaMedina para sus seguidores de siempre y los nuevos que obtendrá a partir de ahora.

Auguramos éxitos para Verónica, una dama que los empresarios artísticos deben tomar en cuenta, ya que ella representa una parte muy importante de nuestro patrimonio cultural y la buena calidad siempre es bien recibida y nunca está de más. ¡Qué Dios la bendiga siempre!

21 de marzo de 2014

La ventaja de organizar tus pensamientos.

Si una persona desea organizar sus pensamientos lo primero que hace es conocer los mecanismos mediante los cuales estos operan en la mente. No existe una manera infalible de organizar lo desconocido, lo más conveniente es que conozcamos la forma en que pensamos. En esta ocasión, hemos clasificado los pensamientos en tres grupos: la imaginación, la consideración y el discurrimiento. La imaginación es la facultad del ser para recrear lo real o lo ideal. Muchas veces la imaginación puede estar fundamentada en ideas falsas y/o fantasiosas, otras veces está encaminada a la consecución de algún fin determinado. Por ej. La creación de un dibujo o diseño. La consideración es el pensamiento que utilizamos para reflexionar sobre lo que se nos ha presentado. Consideramos cual es el mejor camino para llegar a un destino conocido o también ponemos en consideración del pensamiento una situación o acontecimiento que amerita una solución. El discurrimiento o razonamiento es el que nos llega al inventar algo, al crear medios y formar estructuras nuevas en el pensamiento. Cuando razonamos, ordenamos las ideas en la mente hasta llegar a una conclusión. Discurrir en el pensamiento es darse cuenta de lo infinitamente nuevo que el todo representa. Pongámoslo de modo resumido: en una escala gráfica, la imaginación ocupa el lugar del cero, es el puente tridimensional entre lo positivo y lo negativo, el centro que no está ni arriba ni abajo. Justo en el medio. Imaginamos cosas nuevas y creativas, entonces la imaginación fluye en el terreno del discurrimiento o, también podemos imaginar cosas sobre situaciones conocidas o familiares, en esos casos la imaginación se mueve en los terrenos reflexivos de la consideración. La consideración o reflexión, en la misma escala gráfica, ocupa el espacio debajo del cero. Consideramos cuestiones acerca de las cuales tenemos información suficiente como para pretender estudiarlas cuidadosamente. El discurrimiento está arriba, en el lado positivo. Es ese vigilante que observa desde la torre e identifica los movimientos del entorno, es quien escucha en el silencio… Es energía pura y sin contaminación. Cuando una persona ha obtenido algún tipo de información, la asimila a través de los sentidos y la archiva mediante sus pensamientos. Dichos pensamientos pasan a ser parte de su memoria, de sus recuerdos. El ser de pensamientos organizados no se expone a ser esclavizado por ellos sino que vive permanentemente en el discurrimiento. Entonces, y solo entonces, el ser opera,piensa y actúa libremente y sin ataduras.

15 de marzo de 2014

El peligro de vivir pensando en el recuerdo.

El individuo que insiste en vivir Pensando en el recuerdo se anula a sí mismo durante el espacio de tiempo que ese estado prevalece. Algunas personas viven ahí las 24 horas de cada día. Cada minuto que una persona invierte pensando en el recuerdo constituye una ausencia física y espiritual del individuo. En unos casos el ser cree estar escondido de la realidad, sumergido en la mente, y en muchos otros casos ni siquiera se entera de su encierro pues fue conducido allí desde pequeño e ignora que existe otro mundo… el mundo real. Caso diferente ocurre cuando el ser toma la iniciativa consciente de revisar sus memorias en busca de algún recuerdo específico. Ese movimiento se produce en algunos segundos, a veces ocurre en microsegundos. Todo dependerá del grado de armonía que el individuo guarda consigo mismo y con el orden divino. En esos casos, y solo en esos casos, el uso de los recuerdos es tan útil e inofensivo como abrir un cajón en nuestro escritorio, mirar dentro, vemos al objeto por completo y es todo lo que amerita la situación, volvemos a cerrar el cajón. Permitir que sea el recuerdo lo que controle su vida deja nada de provecho. Además de la inutilidad que caracteriza al ser durante ese proceso, los recuerdos causan otro perjuicio a la existencia al interrumpir la captación de lo que el ser está viviendo en ese instante. Es como si usted fuera a la universidad, se sentara en el salón de clases, y luego se durmiera. Esta es una de las principales razones por las cuales las personas dicen tener mala memoria. En realidad nunca vivieron el suceso conscientemente, nunca estuvieron allí. El nivel de recuerdo que usted mantiene organizado dentro de su archivo mental acerca de experiencias vividas, hechos o sucesos determinados, le dice claramente el nivel de consciencia en que se encontraba cuando los mismos ocurrieron y/o el nivel de consciencia en que se encuentra hoy. El nivel de consciencia se hace evidente ante la rapidez, claridad y cantidad de recuerdos que usted puede manejar libremente sin esclavizarse al recuerdo. Si hacemos una similitud entre la computadora y los archivos de nuestra memoria, el óptimo nivel de consciencia sería equivalente a tener el escritorio siempre organizado. Lo ideal es conseguir una organización tal, que le permita tener todo dentro de un solo ícono al cual acceder pulsándolo cuando la situación lo amerite. Para lograrlo, usted tiene que saber exactamente cuáles son sus prioridades en el plano material. Su vida personal, familia, amigos, pasatiempos, negocios, etc. Cada aspecto a lo que usted le dé extrema importancia habrá de ser un ícono en su escritorio. Si observa que tiene demasiados íconos o un ícono tan grande que ocupa todo su tiempo, entonces ya usted sabe que no está viviendo plenamente. El individuo vive plenamente y en armonía consigo mismo cuando se está dando cuenta permanentemente que todo lo que está viviendo es nuevo y por consiguiente está armonizando lo espiritual con lo físico, y no interrumpe el melodioso y armónico estado mental natural.

26 de febrero de 2014

Rafael Solano: Música popular con traje de gala.

El maestro Rafael Solano estuvo el lunes 24 de febrero en el programa "Esta noche Mariasela", recibiendo un merecido homenaje a su grandiosa trayectoria musical. Estuvieron presentes los cantantes: Niní Cáffaro, Luchy Vicioso y "El Magistrado" Fernando Casado, tres de los frutos que sembró el maestro Solano en los años sesenta cuando producía y conducía el espacio televisivo "La Hora del Moro", que se transmitía por Rahintel, canal 7, en Santo Domingo. Me extrañó mucho no ver al también cantante Vinicio Franco, quien permaneció junto a la orquesta de Solano por muchísimos años. La mayoría de nosotros, que no recordamos o no estuvimos en los tiempos en que Cáffaro, Casado y Vicioso formaron parte del elenco del programa de Solano, sí recordamos a Vinicio Franco cantando merengue del bueno en el programa "Solano en Domingo", cuyo nombre tampoco se mencionó.

Solano en Domingo también tuvo su época de prestigio en la televisión dominicana, era un espacio de mucho garbo y clase, culto… fino. Así ha sido la permanencia de Rafael Solano en la historia de la cultura musical de nuestra nación. Llegó a Santo Domingo en el año 1950, proveniente de su natal Puerto Plata, e inmediatamente pasó a formar parte de "La Voz Dominicana", televisora que ostentaba la presencia de los mejores artistas dominicanos de la época y que contaba con varios profesores de arte de fama mundial traídos desde Europa y otros lugares, bajo la supervisión y dirección de Petán Trujillo. Se le preguntó a Solano cómo fue que él no llegó a escribir una canción para "El Jefe", como llamaban a Rafael Leonidas Trujillo, en aquellos años, y el maestro contestó que "fue un golpe de suerte que no lo hiciera". Añadió que recibió la noticia de que en una reunión de Trujillo con su séquito gubernamental salió a relucir que Solano nunca había escrito un tema para Trujillo. Al enterarse de los rumores, el maestro Solano intentó escribir la canción para evitar caer en desgracia con el régimen trujillista. No logró obtener inspiración, pues eran tantos los temas sobre Trujillo que él no encontraba nada nuevo que decir sobre el Jefe.

A finales de los cincuenta marchó al extranjero, a Nueva York, donde siguió perfeccionando su conocimiento musical.

Ya a la edad de nueve años Rafael Solano tocaba el violín. Cuando se le preguntó el porqué se dedicó a la música popular si su meta era la música clásica, el maestro respondió que: "Hoy en día todavía es imposible vivir de la música clásica en nuestro país". Es duro tener que aceptarlo, pero es así. Solano dijo que sabía como había dejado a su madre en Puerto Plata y tuvo que dedicarse a cultivar el ámbito popular para hallar su sustento y el de su madre. Puso como ejemplo que un concertista de piano tarda alrededor de un año ensayando y preparando un concierto y luego hace una presentación en el Teatro Nacional, o quizás dos, y eso es todo. Expresó que es algo diferente en Europa donde los pianistas de concierto se presentan oy en Marsella, mañana en París, y pueden dedicar todo un año a presentaciones fruto del año que duraron ensayando.

Cantantes como Fernandito Villalona, Adalgisa Pantaleón, y muchos otros, salieron de aquellos famosos festivales de la voz que el maestro Solano organizó en los años setenta. El legado de Solano a nuestra cultura es incalculable, incluso él mismo no podría saber cuántas vidas ha influenciado con su carácter y dedicación. Su hija, la comunicadora Patricia Solano, dijo que su padre nunca les habló ni a ella ni a sus demás hermanas en un tono fuerte, por el contrario, siempre les habló con mucho amor y ternura. De esa manera se ha ganado el respeto y admiración de todos sus familiares, amigos y personas que han trabajado con él.

Lo mejor de todo es que el maestro Rafael Solano se mantiene fuerte y sano a pesar de los años transcurridos, que son muchos, dedicados a la música. Dijo sentirse saludable y que cuando va a cualquier médico a consultarse por asuntos de rutina, siempre lo reciben cantándole su canción "Dominicanita". Y es que esa y muchas otras canciones de Solano forman parte fundamental de nuestra historia musical. Aunque todo el mundo sabe que su canción más emblemática lo es "Por amor", que ha sido grabada en diversos idiomas por varios cantantes de distintas épocas y culturas.

El Señor continúe bendiciendo los pasos del maestro Rafael Solano y nos permita seguir disfrutando por mucho tiempo más de su talento, sus composiciones y la magia musical que brota de su piano a través de sus manos.

25 de febrero de 2014

Matías Ramón Mella. Poema en su honor.

 

Uno de los tres padres de la patria Dominicana. Fue un estratega militar que luchó en la guerra independentista para expulsar a los haitianos de nuestro territorio y luego luchó en la guerra de Restauración en contra de Pedro Santana y el ejército español del bando de los anexionistas. Fue el ideólogo de la guerra de guerrillas que usó el ejército dominicano para derrotar al bando que propugnaba la anexión.

Escribí este poema en su honor como una muestra de agradecimiento a su memoria por haber dado toda su vida a la causa de nuestra patria. Hoy, 25 de febrero, día de su natalicio. ¡Qué viva Matías Ramón Mella! ¡Qué viva la República Dominicana!   



Cuando pienso en Mella.

Cuando pienso en Mella, quiero verme en él.

Anhelo tener siempre su valentía, su amor por nuestra patria y su lealtad.

Cuando pienso en Mella, imagino aquel muchacho, miembro de los trinitarios, que arriesgó todo en su vida para darnos libertad.

Y no quiero recordarlo los 25 de febrero. Como hermano, como amigo, lo recuerdo el año entero.

Porque un día no me basta para sentirme orgulloso de haber nacido en la misma ciudad que lo vio nacer.

Porque un día es poca cosa para tantos ideales que aprendimos de él.

Pienso en Mella el año entero, pienso en Mella en todos lados; En el parque, en la piscina, en mi casa, en el mercado.

Pienso en Mella y me estremece sentirme dominicano.

¡Patria hermosa!, ¡Patria amada! ¡Cuántos héroes has parido!

Es Matías Ramón Mella uno de tus preferidos.

No fue sólo aquel trabuco disparado por sus manos,

Es su valor, es su hombría, por lo que lo recordamos.

Que como tú, Ramón Mella, sean nuestros militares.

Que políticos y gobernantes defiendan tus ideales.

¡Amor para nuestra patria! ¡Amor para nuestra gente!

La libertad que tenemos, dominicanos, hermanos, tenemos que mantener.

Cuando pensemos en Mella... ¡queramos ser como él!