30 de abril de 2020

¿Cómo puedes conocerte mejor?

Si observas detenidamente tu manera de conducirte ante las eventualidades cotidianas es posible que obtengas algunas sorpresas inesperadas. Probablemente encontrarás incoherencias entre la persona que dices ser y la conducta que exhibes en determinado momento del día, en ocasiones imprevistas o hasta en las más repetidas de tus rutinas. Quizás has dicho siempre que algo o alguien es sumamente importante para ti, pero nunca sacas tiempo para dedicárselo; es probable que anheles iniciar una actividad por largo tiempo y cuando te decides comienzas a  mostrar ansiedad por terminar lo que apenas acaba de empezar. Estos ejemplos son simples y las personas tienden a no prestar demasiada atención en esas pequeñas cosas, no obstante, son este tipo de incoherencias las que a menudo logran crear la sensación de que algo está desafinado en el ambiente. La buena noticia es que si comienzas a observar tu conducta con detenimiento identificarás fácilmente cuáles son esas áreas en las que has desenfocado tus objetivos, o cuáles son esos objetivos que no armonizan con tus posibilidades actuales. Es importante que  observes lo que piensas, cómo lo piensas y bajo cuáles circunstancias piensas de tal o cual modo… hazlo sin juzgar, sin prisa, sin querer encontrar algo específico, sólo observa lo que piensas y pregúntate luego si tus pensamientos están relacionados con el tipo de persona que dices ser o crees que eres. Al final de tales comparaciones podrás repasar tus acciones… comenzarás a conocerte mejor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si posees inteligencia...¡dime lo que piensas!