9 de febrero de 2017
Ejercita tu cerebro y mantenlo fuerte, ágil y sano.
Que el cerebro humano trabaja por asociación de ideas es algo demostrado ampliamente por la neurociencia. Sin embargo, el desarrollo de la computadora en los momentos actuales ha permitido comprobar aquellas conclusiones que la comunidad científica había formulado a través del tiempo y que indicaban que dichas asociaciones entre las ideas del cerebro son dinámicas, constantes y crecientes. Mientras más se utiliza el cerebro para ampliar el conocimiento en un área determinada mayor será el almacenamiento de ese tipo de información y aumentará la rapidez con que se asocian las ideas en el mismo. También puede concluirse que a mayor variedad de informaciones y aprendizajes a que exponemos nuestro cerebro mayor agilidad mental tendremos y a la vez fortalecemos nuestra red cerebral al punto de poder mantenerlo sano en el tiempo, alejando las enfermedades propias de la atrofia cerebral, algo que en el pasado se creía inevitable, aun cuando se alcanza una edad avanzada. Científicos de la Universidad de California en Berkeley, encabezados por el investigador neuronal Alex Huth, realizaron el año pasado un estudio en siete individuos a quienes hicieron escuchar historias narradas en la radio durante dos horas, mientras permanecían inmóviles en el escáner, sus ojos cerrados y con los audífonos colocados en las orejas. A través de dicho estudio pudieron darse cuenta que diferentes áreas del cerebro accionaban de acuerdo al tipo de palabras que los sujetos escuchaban, es decir, si escuchaban una palabra relacionada con un lugar o localidad, se accionaba un área del cerebro que volvía a accionarse si escuchaban otra palabra relacionada con lugares; una palabra relacionada con el tiempo, digamos minutos, por ejemplo, accionaba en el cerebro la misma área que las palabras horas, segundos, etc. Las palabras con más de un significado accionaban más de un área del cerebro a la vez. Fueron un total de doce categorías de palabras las identificadas por los científicos en dicho estudio, ellos habían seleccionado 985 palabras previamente y mediante imágenes tomadas con Resonancia Magnética Funcional, una técnica que permite captar las variaciones de oxígeno y glucosa en el cerebro, determinaron las doce categorías siguientes: táctil, visual, numérica, localización, abstracto, temporal, profesional, violencia, público, emocional, mental y social.
Ese estudio hoy en día ha sido perfeccionado a medida que las técnicas empleadas en el campo de la computación y la medicina van adquiriendo nuevas formas de experimentación. Todavía estamos lejos de comprender la magnitud y excelencia que contiene el cerebro humano y todo lo que el Creador diseñó cuando creo al hombre, pero, con este escrito pretendo incentivarlos a: fortalecer el cerebro mediante el estudio constante y la adquisición de nuevos conocimientos, filtrar y seleccionar adecuadamente el tipo de información al que exponen sus cerebros; y, a mantenerse mentalmente sanos al entender que el cerebro, como todo en nuestro cuerpo, necesita hacer ejercicios, descansar y nutrirse de manera apropiada, tanto física como mentalmente hablando. Ya te lo dije, ahora tú decides.
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